CARACTERIZACIÓN DE LAS EVIDENCIAS CULTURALES EN LOS YACIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS DEL MUNICIPIIO CABAIGUÁN, PROVINCIA SANCTI-SPIRITUS, CUBA [1ª VERSIÓN]

Continuación (Tercera Parte)


Yacimiento arqueológico El Crisol

Se halla ubicado a 2 km, al NW del poblado de El Hatico y a 65 m de la margen derecha del río Calabazas.

El descubrimiento y las primeras colectas en superficie fueron realizadas por Hiraldo Rojas Fumero, miembro del Grupo CAONAO, en abril de 1984.

El sitio está delimitado por un área de 45 m x 20 m, aproximadamente, en la cual las evidencias afloran en superficie sin llegar a existir concentraciones de éstas.

El único tipo de material colectado es lítico y además, resulta realmente interesante el hallazgo de una lámina-cuchillo con borde dorsal natural y retoque, que por su longitud se asemeja a las del sitio Seboruco, en la región oriental de nuestro país.Esta lámina -cuchillo está elaborada en caliza silicificada y sus dimensiones son de 22,5 cm x 5,6 cm, de sección triangular.

En sentido general, no son destacables los retoques en las herramientas de El Crisol. Las herramientas más sobresalientes son las muescas y denticulados en lascas, aunque no son muy abundantes.

Se aprecian cambios de orientación en algunos núcleos; así como núcleos para la obtención de lascas y láminas, globulares y de planos de golpeo opuestos.

Fueron colectadas láminas fragmentadas de gran grosor y dimensiones, las cuales deben corresponder a herramientas con borde dorsal romo.

En las puntas se observó la eliminación de parte del talón por la cara dorsal mediante un lascado, similar a la técnica observada por primera vez en estos sitios en Las Damas I.

Por lo general, no hay un uso intensivo de las herramientas en lascas; lo cual puede ser un indicativo de temporalidad del asentamiento.

Existe una industria laminar con características similares a la de
Las Damas I y Seibacoa I.

El retoque fundamental que se aprecia en las lascas microlíticas es por muescas. Algunas obstentan un retoque fino, pero no muy acentuado.

Los percutores poseen pocas huellas en su superficie de trabajo y no es meritorio establecer un análisis valorativo de los mismos por el reducido número de ejemplares existentes.

El material tintóreo consiste en fragmentos de rocas de color rojo (hematita) de regular tamaño. No aparecen huellas de fricción en éstas.

También se observa un número apreciable de guijarros sin utilizar, presumiblemente como fuente de materia prima.


Copyright: Santiago F. Silva García
Orlando Álvarez de la Paz

Hasta la próxima:







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